[Rank] In Conversione S. Pauli Apostoli;;Duplex majus;;4;;ex Sancti/06-30 [Hymnus Vespera] @Sancti/06-30:Hymnus Matutinum [Ant 1] Levántate, Ananías, * y busca a Saulo, que está orando; porque es éste para mí vaso de elección, para que lleve mi nombre ante las naciones y los reyes y los hijos de Israel. [Oratio] Oh Dios, que enseñaste a todo el mundo con la predicación del bienaventurado apóstol Pablo, te rogamos que nos concedas que cuantos celebramos hoy su Conversión, imitando sus ejemplos, lleguemos a ti. $Per Dominum _ @Sancti/01-25:Commemoratio4 [Invit] Alabemos a nuestro Dios, * En la conversión del Doctor de los gentiles. [Lectio1] De los Hechos de los Apóstoles !Act 9:1-5 1 Saulo, respirando aún amenazas de muerte contra los discípulos del Señor, se llegó al sumo sacerdote, 2 pidiéndole cartas para las sinagogas de Damasco, a fin de que si allí hallaba quienes siguiesen este camino, hombres o mujeres, los llevase atados a Jerusalén. 2 Estando ya cerca de Damasco, de repente se vio rodeado de una luz del cielo; 4 y cayendo a tierra, oyó una voz que le decía: Saulo, Saulo, ¿por qué me persigues? 5 Él contestó: ¿Quién eres, Señor? Y Él: Yo soy Jesús, a quien tú persigues. Duro es para ti dar patadas al aguijón. [Responsory1] @Sancti/06-30:Responsory1 [Lectio2] !Act 9:6-9 6 Él entonces, temblando y despavorido, dijo: Señor, ¿qué quieres que haga? 7 Y el Señor le respondió: Levántate y entra en la ciudad, donde se te dirá lo que debes hacer. Los que venían acompañándole estaban asombrados, oyendo sonidos de voz, pero sin ver a nadie. 8 Se levantó Saulo de la tierra, y aunque tenía abiertos los ojos, nada veía. Por lo cual llevándole de la mano le metieron en Damasco. 9 Aquí se mantuvo tres días privado de la vista, y sin comer ni beber. [Responsory2] @Sancti/06-30:Responsory2 [Lectio3] !Act 9:10-16 10 Había en Damasco un discípulo, de nombre Ananías, a quien dijo el Señor en visión: ¡Ananías! Él contestó: Heme aquí, Señor. 11 Y el Señor a él: Levántate y vete a la calle llamada Recta, y busca en casa de Judas a Saulo de Tarso, que está orando; 12 y vio en visión a un hombre llamado Ananías, que entraba y le imponía las manos para que recobrase la vista. 13 Y contestó Ananías: Señor, he oído a muchos de este hombre cuántos males ha hecho a tus santos en Jerusalén, 14 y que viene aquí con poder de los príncipes de los sacerdotes para prender a cuantos invocan tu nombre. 15 Pero el Señor le dijo: Ve, porque es éste para mí vaso de elección, para que lleve mi nombre ante las naciones y los reyes y los hijos de Israel. 16 Yo le mostraré cuánto habrá de padecer por mi nombre. [Responsory3] @Sancti/06-30:Responsory3 [Lectio4] Sermón de San Agustín, Obispo. !Sermón 14 de los Santos. Hoy el pasaje de los Hechos de los Apóstoles refiere que el Apóstol Pablo se convierte, de perseguidor de cristianos en predicador de Cristo. Jesucristo ha abatido un perseguidor para hacer de él un doctor de la Iglesia, hiriéndolo y curándolo, dándole a la vez la muerte y la vida. Cordero inmolado por lobos, cambia los lobos en corderos. En la célebre profecía en que vemos al patriarca Jacob bendecir a sus hijos (con la mano extendida sobre los que estaban presentes y los ojos fijos en lo por venir) hállase predicho lo que se cumplió en Pablo, como él mismo afirma, de la tribu de Benjamín. Pues cuando Jacob bendijo a sus hijos, llegando a Benjamín exclamó: “Benjamín, lobo rapaz”. [Lectio5] ¿Pues qué? ¿Será siempre lobo rapaz? En manera alguna; pero el que “por la mañana devorará la presa, por la tarde repartirá los despojos”. Esto se verificó en el Apóstol San Pablo, al que se refería esta predicción. Considerémoslo: devorador por la mañana y repartidor de los despojos por la tarde. Mañana y tarde significan aquí el principio y después. Lo entederemos así: devorará al principio, mas después repartirá los despojos. Ved al devorador. Saulo, recibidas las cartas del príncipe de los sacerdotes, fue a Damasco, para llevar presos a Jerusalén a cuantos cristianos hallase, y entregarlos a los sacerdotes para que los castigasen. [Lectio6] Iba deseando y anhelando matanzas, es decir, devorando por la mañana. Así, cuando Esteban, primer mártir por el nombre de Cristo, Saulo estaba manifiestamente presente; presenciaba el suplicio con tanta hostilidad que, no bastaba lapidarle con sus propias manos, por lo que, a fin de hallarse en todas las manos que lanzaban piedras, guardaba los vestidos de los verdugos, desahogando su furor secundándolos a todos, mejor que si lo hiciera él. Vemos la primera parte de la profecía: “Devorará por la mañana”. Veamos cómo repartirá por la tarde los despojos. Desde el cielo la voz de Cristo lo derriba; recibe la orden de no perseguir más y cae con el rostro en tierra. Primero debía ser abatido, luego realzado; herido al principio, después curado. [Ant Laudes] @:Ant Vespera 3:s/;;.*//g [Capitulum Laudes] !Act 9:1-2 v. Saulo seguía respirando amenazas de muerte contra los discípulos del Señor; fue a ver al sumo sacerdote, y le pidió cartas para la sinagoga de Damasco, autorizándolo para traer presos a Jerusalén a cuantos hombres y mujeres descubriera que seguían este camino. $Deo gratias [Lectio Prima] !Act 9:22 v. Pablo se crecía y dejaba confusos a los judíos de Damasco, demostrando que Jesús es el Mesías. [Capitulum Sexta] !Act 9:8-9 v. Se levantó Saulo del suelo, y con los ojos abiertos no veía nada. Y guiándolo de la mano, lo hicieron entrar en Damasco. Durante tres días estuvo allí ciego, sin comer ni beber. $Deo gratias [Ant Vespera 3] Yo planté, * Apolo regó, pero Dios hizo crecer. Aleluya. ;;109 Muy a gusto presumo * de mis debilidades, porque así residirá en mí la fuerza de Cristo.;;112 La gracia de Dios * en mí no ha sido estéril, sino que su gracia permanece siempre en mí.;;115 En Damasco, el gobernador * del rey Aretas quiso prenderme; algunos hermanos me descolgaron por la muralla, metido en un costal, y así escapé de sus manos, con la ayuda del Señor.;;125 Tres veces me han azotado * con varas, una vez me han apedreado. He padecido tres naufragios por el nombre de Cristo.;;138 [Commemoratio4] !Conmemoración de S. Pedro Apóstol (deinde dicitur) Ant. Tú eres el Pastor de las ovejas, Príncipe de los Apóstoles, a ti se te han entragado las llaves del reino de los cielos. _ V. Tú eres Pedro. R. Y sobre esta piedra edificaré mi Iglesia. _ $Oremus (sed rubrica 1960 hæc versus omittuntur) v. ¡Oh Dios, que, al entregar al apóstol San Pedro las llaves del reino de los cielos, le concediste la potestad de atar y desatar!; concédenos por su intercesión, ser liberados de las ataduras del pecado. $Qui vivis