[Ant 1] Que el Señor escuche * vuestra oración y se reconcilie con vosotros, y no os abandone en la tribulación el Señor Dios nuestro. [Lectio1] Empieza el Libro segundo de los Macabeos. !2 Mac 1:1-6 1 “A los hermanos judíos que moran en Egipto, salud. Los hermanos judíos de Jerusalén y de Judea, paz y felicidad. 2 Que Dios os bendiga, acordándose de su alianza con Abraham, Isaac y Jacob, sus fieles siervos. 3 Que a todos os dé corazón dispuesto para venerarle y cumplir con todo ánimo y buena voluntad sus preceptos. 4 Que os abra el corazón para entender su Ley y sus preceptos, os conceda la paz, 5 oiga vuestras súplicas, se reconcilie con vosotros y no os abandone en el tiempo de la desgracia. 6 Esta es nuestra oración por vosotros. [Responsory1] @Tempora/101-0:Responsory1 [Lectio2] !2 Mac 1:18-19 18 Estando, pues, para hacer la purificación del templo en el mes de Casleu, hemos creído deber nuestro manifestároslo para que también vosotros celebréis la fiesta de los Tabernáculos y del fuego que se encendió cuando Nehemías, después de edificar el templo y el altar, ofreció sacrificios. 19 Pues, al ser nuestros padres llevados a Persia, los sacerdotes piadosos que había entonces, ocultamente tomaron el fuego del altar y lo escondieron en un hueco, a manera de pozo seco, en el cual lo depositaron, tan en seguro, que el sitio quedó de todos ignorado. [Responsory2] @Tempora/101-0:Responsory2 [Lectio3] !2 Mac 1:20-22 20 Transcurridos muchos años, cuando a Dios plugo, Nehemías, que había sido enviado por el rey de Persia, mandó a los nietos de los sacerdotes que lo habían ocultado a buscar el fuego, y, según ellos contaron, no hallaron fuego, sino un agua espesa, 21 de la cual les mandó que sacasen. Cuando las víctimas estaban dispuestas en el altar, ordenó Nehemías a los sacerdotes que con el agua rociasen la leña y lo que encima de ella había. 22 Cumplido esto y pasado un poco de tiempo, salió el sol, que antes estaba nublado, y se encendió un gran fuego, quedando todos maravillados. [Responsory3] @Tempora/101-0:Responsory3 [Lectio4] Del Tratado de San Juan Crisóstomo sobre el Salmo 43. _ Nosotros, oh Dios, lo hemos oído; nuestros padres nos han contado una obra que hiciste en sus días. El profeta habla en este salmo en nombre de los Macabeos, haciendo un relato profético de las cosas que debían suceder en su época. Porque lo propio de los Profetas consiste en recorrer todos los tiempos, el presente, el pasado, el por venir. Hay que empezar por decir quiénes eran los Macabeos, lo que sufrieron, lo que hicieron. Cuando Antíoco, llamado Epífanes, invadió la Judea y todo lo devastó, obligó a muchos judíos a abandonar las tradiciones patrias. Entonces los Macabeos se mantuvieron constantes en medio de la prueba. [Responsory4] @Tempora/101-0:Responsory4 [Lectio5] Y cuando sobrevenía una guerra violenta, en la que no veían ellos ventaja alguna, se ocultaban; lo cual hicieron más tarde los Apóstoles. No siempre daban la cara, ni se lanzaban temerariamente al peligro; a veces se retiraban, ya huyendo, ya ocultándose. Mas en cuanto pudieron respirar un poco, abandonando sus guaridas cual vigorosos cachorros, y apareciendo en público, resolvieron salvarse a sí mismos y a cuantos pudieran. Recorriendo la ciudad y todo el país, reunieron a cuantos encontraban todavía fieles y constantes; y también a muchos que se habían dejado abatir o corromper, y les restituyeron a su primitivo estado, persuadiéndolos a abrazar de nuevo la ley de sus padres. [Responsory5] @Tempora/101-0:Responsory5 [Lectio6] Recordaban que Dios es bondadoso y clemente, y que jamás niega la salvación al que hace penitencia. Estas exhortaciones pusieron en pie de guerra un ejército de hombres valerosísimos, que combatían, no por sus mujeres, sus hijos y sus servidores; no por ahorrar al país la ruina y la esclavitud, sino por la ley de sus padres y los derechos de la nación. Dios era su generalísimo; exponían sus vidas y derrotaban al enemigo, no fiando en sus armas, sino en la santidad de la causa por la cual combatían. Al marchar al combate, no atronaban el aire con vociferaciones ni cantos profanos; ni llevaban bandas de músicos, sino que pedían a Dios que les enviara su auxilio, que los asistiera y sostuviera, ya que hacían la guerra en defensa de su causa, y combatían por su gloria. [Responsory6] @Tempora/101-0:Responsory6 [Responsory7] @Tempora/101-0:Responsory7 [Responsory8] @Tempora/Pent01-0:Responsory8